El fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, y el presidente de la República, Gustavo Petro, sostuvieron un encuentro en el que llegaron a varios acuerdos.
Entre ellos, se mantuvo la idea de no despenalizar delitos como el incesto y la inasistencia alimentaria. Por esta misma línea corren otras faltas a la ley como la injuria y la calumnia.
Según el fiscal, también cobró importancia la decisión de cerrarle las puertas al proyecto de humanización carcelaria a los narcotraficantes y demás miembros de las cadenas del tráfico de drogas.
“Lo que se acuerda es que no haya ningún beneficio a importadores, ni a vendedores, ni a productores de sustancias estupefacientes en Colombia, sino sólo al pequeño cultivador que era el origen de esa disposición”, dijo.
“Aquellos que quisieron incluir esto, quedan si esa herramienta, porque Colombia no va a permitir que se beneficie de esa manera esa cadena del narcotráfico y en eso coincidimos con el presidente de la República”, agregó.
En esta reunión también participaron el ministro de Justicia, Néstor Osuna; la jefa de Gabinete, Laura Sarabia; y la vicefiscal, Martha Mancera.